1ª visita: Examen preliminar y diagnóstico: Con este estudio, el dentista determina si usted puede ser tratado con implantes y le explicará cómo, dónde y el número de implantes que se le van a colocar. Hay algunos estados de salud que pueden impedir la colocación de implantes; entre ellos podemos destacar enfermedades graves que influyen en el metabolismo del hueso, tumores malignos que afectan al hueso o radioterapia en altas dosis, por lo que hay que conocer y analizar el historial clínico del paciente. Un alto consumo de tabaco también puede ser contraindicado para la coclocación de implantes

Reposo y cicatrización:
Durante el periodo de cicatrización los implantes se integran firmemente en el hueso, este proceso se conoce con el nombre de “osteointegración”: el contacto íntimo a nivel molecular entre el implante y el hueso el cual irá recubriendo toda la superficie del implante e inmovilizándolo poco a poco dándole una total estabilidad. Este periodo de osteointegración dura aproximadamente entre 2 y 3 meses en mandíbula y entre 4 y 5 meses en el maxilar superior dependiendo del tipo y calidad del hueso del paciente. No obstante, este periodo puede acortarse sensiblemente si así lo determina el cirujano.

3ª Visita: Colocación de pilares
Mediante una sencilla operación, normalmente transmucosa y con el implante completamente integrado, se sustituye el tapón de cierre del implante por un pilar para conformar y modelar la encía y cicatrizar los tejidos. Esta sencilla operación suele durar normalmente 15 minutos.

Después de un corto período de cicatrización, de entre 1 semana y 15 días, el tratamiento quirúrgico ha terminado.

4ª Visita: Toma de impresiones
Esta es la fase del proceso en la que su cirujano le tomará medidas para elaborar un modelo, que será una réplica exacta de su boca, para que el laboratorio dental pueda crear sus nuevos dientes. A medida que la prótesis se esté confeccionando, su dentista le llamará para ir probando los que serán sus dientes definitivos.

5ª Visita: Colocación de prótesis
El cirujano y el prostodoncista decidirán la prótesis que mejor se adapte a sus implantes para proporcionarle la función y la estética que más se asemeje a su dentadura natural.

Actualmente, la introducción de nuevos materiales como el zirconio, material de una gran dureza, de color blanco y muy biocompatible, permite nuevas posibilidades, más alternativas y proporciona los mejores resultados estéticos.